El parque inmobiliario de la Comunidad Valenciana, en concreto de la provincia de Alicante, se hace viejo y de acuerdo a la legislación actual será necesario acometer actuaciones de rehabilitación de manera urgente en un gran número de edificios y viviendas en los próximos meses y años.
En la Comunidad Valenciana, el 46% de las viviendas están construidas antes de 1980, por lo que no cuentan con elementos de protección y aislamiento térmico. El parque de viviendas de más de 50 años en nuestra Comunidad representa el 26%, 662.000 viviendas, lo que significa una importante demanda potencial de rehabilitación. Por su parte, en la provincia de Alicante existen cerca de 90.000 edificios construidos antes de 1960, en los que el estado de conservación de 22.500 se considera deficiente. Para el Colegio de Arquitectos, alrededor de 45.000 inmuebles serían susceptibles de someterse a una rehabilitación.
Según un informe de la Cosellería de Infraestructuras, en los 2 próximos años sería necesario modernizar unas 32.000 viviendas, lo que podría generar una inversión de 250 millones de euros.
Nueva Ley de Ordenación del Territorio. El agente urbanizador.
A finales de Julio el ejecutivo autonómico aprobaba la Ley de Ordenación del Territorio, en la que se intenta potenciar la colaboración público-privada como factor clave para estimular los procesos de rehabilitación y regeneración. Y en ese ámbito vuelve a aparecer la figura del agente urbanizador, quién estará autorizado a rehabilitar zonas urbanas degradadas, bloques de viviendas y fachadas cuyos propietarios no se pongan de acuerdo para actuar en ellas. El gobierno valenciano desea impulsar ese nicho de mercado que se estima puede generar un movimiento de hasta 12.000 millones de euros en los próximos 10 años.
Los técnicos estiman que el coste medio de la rehabilitación de una vivienda alcanzará los 10.400 euros por piso siendo las principales reformas la de las cocinas y baños que supondrán un 73% del total.
Ventajas fiscales y ayudas para la rehabilitación.
Asímismo, tanto el gobierno central como el autonómico ha impulsado un paquete de medidas encaminadas a la ayuda a la rehabilitación. Estas ayudas cvendrán en forma de subvenciones directas y deducciones fiscales en el IRPF para aquellos propietarios que acometan obras de rehabilitación y reformas en sus hogares, bien en el interior del edificio, o en la propia estructura y fachada.
Todo ello encaminado a prevenir un problema de envejecimiento del parque inmobiliario valenciano al que se debe dar solución de manera paulatina y progresiva.